domingo, 8 de agosto de 2010

Bitácora de una periodista colombiana. Hoy presentamos: La posesión

Fui solo por verle la cara de frustración a Uribe, lo confieso. Me gustaría ser más objetiva en este tema, pero lo intenté ocho años y no lo logré. La sensación: todo estuvo fríamente calculado, desde las pausas en los discursos, hasta los aplausos del público. Un público que, déjenme decirles, no dista en nada de la sociedad del siglo XIX, con decirles que aplaudían las mismas cosas que hace 200 años… Se parecían en todo, incluso, en el olor (tendría que nombrar la palabra “rancio”).

Total, estuve montada en el bus que nos llevaría hasta la plaza a las 12.30. Ahhh! La presidencia es muy generosa, nos dieron merienda, que incluía mandarina (supe que la semana pasada vendían 20 mandarinas por 1000; no es que invirtieran mucho en la comida para los periodistas, mejor dicho, nada), además de unas carpetas diseñadas exclusivamente con un logo que decía “Posesión Presidencial Juan Manuel Santos” (lo mismo las sombrillas, que también regalaron) y adentro, una libreta, un CD y un documento que nadie leyó.

“Qué bueno que ya se va, Uribe: paraco hijueputa”. ¡Chan!, pasó un reciclador -muy grosero él- gritando a viva voz. Lo sorprendente, es que a la salida del centro de convenciones Gonzalo Jiménez de Quesada, donde estábamos los periodistas, pocos reaccionaron jocosamente. A estas alturas sonreír es como llover sobre mojado, pensé.

Lo que viene a continuación en la enumeración de una serie de eventos que estuvieron, como dije, fríamente calculados. Quizá por eso es que resulta tremendamente aburridor asistir a la posesión de un presidente. No obstante, insisto, no hubo tal posesión. Fue la despedida del que desde hoy llamaremos ex presidente Álvaro Uribe (aunque todos sabemos que le respirará en la nuca a Juan Manuel Santos, obviamente).

Incluso, voy a escribirlo como lo tengo registrado en mi libreta:
Presidente #49. Reseña y documental de lo que hizo en la mañana: Kogis, Wiwas, Arhuacos; comunidades indígenas de la Guajira de las que -nunca- nadie se acuerda y que a la hora de ser bendecido, se les busca. Reconocimiento. ¿Adivinen qué presentadores hicieron la gala? Los del canal RCN -sí sí, Colombia, sí sí, Caribe-. La plaza: da la sensación de quedar encerrada; genera eco. Francotiradores en los techos, casi dos por edificio... ¿La naturaleza habría bendecido a Santos?, dicen los indígenas que para gobernar primero debes ser bendecido por la madre naturaleza. Las palomas sobrevuelan la plaza. El detalle de las sombrillas, esta vez fueron blancas. Llueve en pleno documental. Entran los presidentes de otros países. Cristina Kirchner sobre sale; cruza las piernas. Encabeza, de izquierda a derecha, la presidenta de Costa Rica. ¿Uribe, estará dopado?. Recorrido de Santos: desde el Palacio San Carlos. Silencio. Imágenes de Santos en las pantallas (una grande en frente, dos atrás... Tiene los ojos más delineados que nunca). Himno nacional: Uribe, mano en pecho, ceño fruncido. Impotencia, prepotencia, impotente. Popurrí de canciones: salsa y llanera “Este es el elemento de la unidad, la confianza, con trabajo hay esperanza… Te canto esta canción que me sale del alma”. La familia presidencial camina sonriente hacia la Plaza de Nariño. Saludos y más saludos. Discurso de Benedetti. Discurso de Santos. Fin.

¿Se podía cubrir algo más que esto? Creo que no, salvo las incoherencias de cada discurso. El de Armando Benedetti, un discurso que desarrolló el eslogan: “Mano dura, corazón grande”, sin que nadie se lo pidiera... ¿Alguien del presente gobierno se atreve en este país a ser sensato? Qué pena Presidente (del Congreso) Benedetti. No vale la pena siquiera citarlo.

Y el de Santos, que valdría la pena comentar en una emisión de Sábados Felices o en el memorial de mentiras: lleno de frases de cajón. Para la muestra un botón: “Porque pasan los años, pasan los presidentes (…)”. Por un momento pensé que iba a culminar con: “Pasa en la vida, pasa en TNT”.

Frases memorables, señores: "¡A los pobres de Colombia no les fallaremos!" o qué tal esta: “El gobierno del presidente Uribe realizó un gran esfuerzo para aumentar la cobertura de salud, pero aún nos queda mucho por hacer”. No diré nada al respecto, saben que estaría en el ranking número uno de los cuentachistes.

Por otra parte, no pierdan de vista que sólo concedió el derecho de autor a una idea del Partido Liberal: “Con leyes como la de Primer Empleo –una propuesta del Partido Liberal para dar incentivos a quienes contraten a los jóvenes que ingresan al mercado laboral” . Con lo cual, señores, se viene un gobierno rojo. Como el Frente Nacional, nos turnamos, qué lindos, qué tolerantes que somos.

Ay, Santos: sos un inimputable. En su discurso también decidió hacer suyas algunas propuestas, aún proclamando la Unidad Nacional, se le olvidó nombrar que la idea de defender el campesino colombiano, fue una propuesta abierta y directa del Polo Democrático. Pero, upsss!, no lo nombró. En cambio, sí dijo: “Vamos a defender al campesino colombiano, vamos a convertirlo en empresario, a apoyarlo con tecnología y créditos, para hacer de cada campesino un próspero Juan Valdez” Juazzzz!.

Y mi perla # 1: “Con campos más seguros, promoveremos el retorno a sus parcelas –como ya se viene cumpliendo, con acompañamiento integral del Estado- de los desplazados y víctimas de la violencia”. Pero es que Santos no lee los diarios? ¡Carajo!, no lo culpo, pero está muy desinformado, pobre.

Perla # 2: “Eso sí –insisto– sobre premisas inalterables: la renuncia a las armas, al secuestro, al narcotráfico, a la extorsión, a la intimidación. No es la exigencia caprichosa de un gobernante de turno. ¡Es el clamor de una nación!”. Pero claro, por fin cae en cuenta que las chuzadas del Das es un asunto vergonzoso. Bueno, por lo menos se está arrepintiendo de lo que hizo como Ministro de Defensa en la era Uribe. Por eso digo: ¡inimputable!

Perla # 3: “El respeto a la vida es un mandato sagrado. El respeto a la libertad e integridad de las personas es una obligación ineludible de todo Estado que se llame democrático”. ¿Y? Me quedé esperando que citara, en cuando menos, a Antanas Mockus. Puede que no sepa que robar ideas es denunciable.

Dejo por fuera los aplausos y el homenaje a Uribe y su señora Lina. También las palabras a Chávez: como que la palabra guerra no está en su diccionario. Perdón, pero esa frase la pensó –primero– Andrés Cepeda. Quería algo más original. Me parece que esta parte merece un capítulo especial, que no ahondaré en mi bitácora. ¡Ay, por Dios! tampoco diré nada de esta frase: “Gloria y honor a las fuerzas armadas de Colombia”.

Pero no pierdan la calma. Viene mi parte bonita de la posesión. A la salida quería ver a Antanas Mockus. Traté de ubicarlo, en medio de la maraña de gente. Pero era complicado.

Les repito que yo fui a ver la despedida de Uribe, no la posesión de Santos, que en últimas, no hubo tal posesión. Es una tremenda continuación al mejor estilo Putín y Medvédev (el caso actual ruso). Es exactamente eso, un relevo de ese pequeño tirano, que sólo pocos despedimos, para continuar con su idea de volver al poder. Y dejar a un títere. En el fondo de mi corazón y no tan en el fondo, deseo, anhelo que Santos le saque los ojos, se los coma fritos.

En fin. Les decía que busqué a Mockus y no me quedé para ver el confeti, ni el desfile de modas de la sociedad capitalina. No. Caminé, bajé la tarima sobre la cual nos montaron a los periodistas, justo en el andén de la Catedral. A punto de pasar las rejas policiales, que separaron la Calle 10 del vulgo, ahí estaba. Lo abrazaba la multitud que se quedó afuera. Él sonreía, saludaba, firmaba papelitos (autógrafos). Le gritaban: ¡Mockus, Mockus acá! Y miraba, feliz. Lo escoltaban los policías, unos cuatro. No lo dejaban caminar. Hasta que alguien gritó fuertemente y por encima de la multitud (sólo vi una mano): “Mockus-somos-tres-millones-y-medio.... Mockusssssssssss”.

Yo, que había quedado con las frases de ese discurso de Juan Manuel Santos: “El mañana está llamando a la puerta”, con esas enfundadas frases de “Llegó la hora de asumir nuestro destino”. No veía tal amanecer. Al contrario, la postal viva y real era un ocaso: un sol escondido tras la legislatura distrital, arropado por nubes grises y unas cuantas palomas volando ¿Dónde diantres estáaaaaaaaaaaaaaaa?.

Pero retumbó: “Somos tres millones y medio”. Silencio en medio de los gritos de la gente. Latidos del corazón: Pum pum… Pum pum. Caminar en cámara lenta. Pum pum. Mockus mira la mano que le hace el gesto, de la cual proviene el grito: “Somos tres millones y medio”. Mockus, sonríe. La gente aplaude. Ojos aguados. Pum pum.

Entonces recordé el rostro frustrado del ex presidente y su imposibilidad de continuar sentado y dirigiéndose a todo un país, como lo solía hacer. Sobre todo, ya no podrá mandar al país como si fuera su hacienda, no lo será -al menos- por cuatro años, si es que no programa un golpe de Estadio.

Entonces... Puede que sí, que venga un nuevo amanecer aún cuando el ocaso sea un estado evidente.

lunes, 14 de septiembre de 2009

"Buscamos la verdad que otros quieren ocultar", Daniel Coronell

(fuente: Revista Cambio http://www.cambio.com.co/)

Director de Noticias Uno-la red independiente, columnista de Semana y docente de los Andes, es la cabeza del equipo periodístico que ganó el Premio Nuevo Periodismo CEMEX+FNPI 2009 en la categoría de televisión por el reportaje "Un crimen casi perfecto", sobre el holocausto del Palacio de Justicia.

¿Qué significa el Premio Cemex+FNPI 2009?
Un gran estímulo para el equipo porque obtuvimos el premio de periodismo más importante de Latinoamérica.
¿Cómo fue el proceso de la investigación?
Arduo. Buscamos todas las imágenes que había en ese momento, las analizamos, las comparamos, estuvimos muy atentos a los detalles, a cada pista que salía y con el archivo del extinto noticiero Promec hallamos una imagen que fue fundamental...
¿Cuál?
Un primer plano del magistrado Carlos Urán que demuestra que él salió vivo del Palacio el 7 de noviembre de 1985 a las 2:17 p.m., pero su cadáver apareció al otro día entre las ruinas.
¿Cómo llega a la primera pista?
No lo puedo contar para proteger la fuente que me permitió el acceso al video.
Y cuándo dice "esta es la gran 'chiva' "...
Cuando la esposa del magistrado Urán lo reconoce saliendo del Palacio de Justicia.
¿En qué va a terminar esta investigación?
Tengo la esperanza de que el esfuerzo de la Justicia produzca algo.
¿Qué es el periodismo?
Es un contrapoder, tiene que ser la contrapartida del lado del ciudadano. El periodismo se debe mantener al margen del ejercicio político para poder mantener el oficio de su poder de fiscalización ciudadana.
¿Y cuál debe ser su real misión?
Hay que pensar más del lado de los gobernados que de los gobernantes, más del lado de las víctimas que del lado de los victimarios, más del lado del consumidor que del empresario.
¿Qué tan independiente es la red independiente?
Tratamos de ser lo más independiente que podemos con un equipo que tenga respeto por sí mismo.
Y eso qué traduce...
Que seguiremos buscando las verdades que otros quieren ocultar.
¿Qué es lo mejor de la política colombiana?
Que nunca es aburrida.
¿Hasta cuándo va Uribe?
El límite estará dado por la desesperación de los colombianos.
¿Qué tan parecidos son Uribe y Chávez?
No puede existir el uno sin el otro.
Defina a Álvaro Uribe...
Hombre inteligente y sin escrúpulos.
Y a Hugo Chávez...
Mandatario populista que tampoco tiene escrúpulos.
¿Cómo ve a Cristina Kirchner?
Como una circunstancia relativamente pequeña en la historia de un país grande.
¿Qué piensa de Rafael Correa?
Él es un hombre con mucha inteligencia y formación pero tan irascible que sus argumentos se pierden en medio de sus iras.
Usted es de los que piensan que Lula Da Silva es el presidente más importante de Latinoamérica...
Y el más moderno. Tiene la visión más futurista de todo el continente. Si existieran más 'Lulas' se pudiese conseguir una mayor comprensión entre los pueblos andinos.
Un compatriota que lo enorgullezca
Gabriel García Márquez porque es la demostración de que la inteligencia y el talento tienen un lugar en nuestra historia, más allá de la corrupción y la violencia. (Hermosa respuesta, observación de la bloggera)
Por último, ¿con qué investigación nos va a sorprender?
Estamos en una investigación muy grande sobre una persona muy cercana a los círculos de poder y que está ejerciendo un tráfico de influencias grande. Ojalá entreguemos resultados muy pronto.

¿Qué es el periodismo?

Es un contrapoder, tiene que ser la contrapartida del lado del ciudadano. El periodismo se debe mantener al margen del ejercicio político para poder mantener el oficio de su poder de fiscalización ciudadana.

Daniel Coronell, ganó el premio CEMEX+FNPI 2009, por su reportaje televisivo "Un crimen casi perfecto".

¿Quiere saber qué piensa de Uribe, Chávez, Correa, Cristina y Lula?
(Entrevista completa en Te tengo el dato)